Los derechos humanos son fundamentales para que nadie se quede atrás
12 septiembre 2023
"Demasiadas personas en todo el mundo no pueden permitirse bienes básicos ni acceder a servicios básicos y se encuentran atrapadas en la pobreza más absoluta, a menudo durante generaciones. Los sistemas económicos actuales son simplemente injustos, discriminatorios y no sostenibles", señaló el Jefe de Derechos Humanos, Volker Türk, durante un declaración que ofreció a principios de este año con motivo del 75° aniversario de la Declaración Universal de Derechos Humanos (DUDH).
La DUDH contempla el derecho a la seguridad social y el derecho al desarrollo y es el elemento fundamental del desarrollo sostenible.
No obstante, la pobreza mundial ha aumentado por primera vez en 20 años a raíz de la pandemia de COVID-19, la emergencia climática y otras crisis. Las desigualdades socioeconómicas se han intensificado dentro de los países y entre ellos, y millones de personas se han sumido aún más en la pobreza y cada vez son más los países endeudados. En consecuencia, gran parte de los avances en la consecución de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible se han estancado o han desaparecido.
Según Pradeep Wagle, jefe de la Sección de Derechos Económicos, Sociales y Culturales de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, la provisión de protección social, el derecho al desarrollo y el trabajo para para lograr los Objetivos de Desarrollo Sostenible son clave para erradicar la pobreza, reducir las desigualdades y garantizar que no dejamos a nadie atrás.
«La pobreza y las desigualdades no son inevitables, son opciones políticas», aseguró Wagle. «La pandemia y otras crisis mundiales complejas han demostrado que los derechos económicos, sociales y culturales son esenciales para el desarrollo sostenible y la dignidad humana".
El derecho a la seguridad social está reconocido en numerosos instrumentos de derechos humanos, como la DUDH y el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales.
La seguridad social permite ejercer otros derechos
La seguridad social es también un derecho habilitador que hace posible el ejercicio de otros derechos humanos como el derecho a la alimentación, a la vivienda, a un nivel de vida adecuado y a la educación y la salud, especialmente por parte de personas desfavorecidas y marginadas.
Wagle afirmó que los Estados tienen la obligación de hacer efectivo el derecho a la seguridad social en la medida en que lo permitan sus recursos, por medio de iniciativas nacionales y la cooperación internacional, y estableciendo sistemas de seguridad social universales e integrales basados en normas y principios de derechos humanos y garantizando la disponibilidad, accesibilidad y adecuación de las prestaciones y servicios.
Según Wagle, el derecho a la seguridad social y el derecho al desarrollo son fundamentales para subsanar la injusticia estructural y las desigualdades dentro de los países y entre ellos.
La protección social es una línea de trabajo fundamental para Derechos Humanos de las Naciones Unidas. La Oficina proporciona orientación a los Estados sobre sistemas integrales de protección social universal, y les anima a adoptar planes de protección social que se centren en llegar a la población más marginada e integren los derechos humanos en la toma de decisiones relacionadas con las políticas económicas, las decisiones de inversión, las opciones de los consumidores y los modelos empresariales.
El derecho a la seguridad social sigue estando fuera del alcance de muchas personas, especialmente de las más necesitadas y de los sectores más desfavorecidos de la sociedad, como niños, mujeres y niñas, personas de edad, personas con discapacidad y pobres:
- El 53,1 % de la población mundial no está cubierta por las prestaciones de la seguridad social.
- El 71,1 % de las personas necesitadas no recibe asistencia social.
- El 78 % de las personas con discapacidades graves no perciben prestaciones por discapacidad.
- El 65 % de los niños y niñas no gozan de un acceso efectivo a la protección social.
- El 59 % de las mujeres que dan a luz no reciben prestaciones de maternidad.
Para Mamataj, una mujer de 38 años que vive en un barrio marginal de Dhaka, la capital de Bangladesh, la seguridad social ha sido un medio para salir de la pobreza y llevar una vida digna para ella y su hija.
Mamataj quedó discapacitada tras un accidente de cocina que la abocó aún más a la pobreza y la exclusión social. Tenía dificultades para pagar los gastos del hogar y la escuela de su hija y acabó dependiendo de amigos y miembros de la comunidad para sobrevivir.
Gracias a las prestaciones por discapacidad de la Seguridad Social que provee el gobierno, se independizó y pueden alimentarse ella y su hija.
“Este dinero ha aportado tranquilidad a mi vida, y ahora puedo ahorrar para el futuro de mi hija", reveló Mamataj.
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Los derechos civiles, políticos, económicos, sociales y culturales, así como el derecho al desarrollo y el derecho a un medioambiente limpio, sano y sostenible, se refuerzan mutuamente. Este es el significado último de la indivisibilidad e interdependencia de los derechos humanos.
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Jefe de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, Volker Türk
Derecho al desarrollo
El Declaración sobre el Derecho al Desarrollo de las Naciones Unidas define el desarrollo más allá del producto interior bruto como un proceso económico, social, cultural y político global destinado a mejorar el bienestar de todos y todas.
La Declaración, basada en la DUDH, fomenta el espacio cívico haciendo un llamamiento a todos los miembros de la sociedad para que participen y contribuyan al desarrollo. También exige igualdad de oportunidades y una distribución justa de los beneficios del desarrollo para abordar la desigualdad creciente dentro de los países y entre ellos.
"El derecho al desarrollo sitúa a las personas en el centro del proceso de desarrollo, de modo que el desarrollo se destine a mejorar el bienestar de toda la población y todas las personas", afirmó Ayuush Bat-Erdene, jefe de la Sección de Derecho al Desarrollo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas.
Esto incluye el fomento de la capacidad institucional y financiera que permita la elaboración de presupuestos públicos que apoyen la seguridad social con un enfoque en los más marginados.
Bat-Erdene señaló que las múltiples crisis a las que nos enfrentamos en la actualidad muestran que el mundo necesita acciones más fuertes y ambiciosas para poner en práctica el derecho al desarrollo y lograr su visión transformadora, lo cual fundamenta la Agenda 2030 y sus ODS.
En su intervención ante el Consejo de Derechos Humanos esta semana, Türk señaló que la Declaración establece derechos y obligaciones por parte de los Estados para impulsar el desarrollo en pro del bienestar de todos y todas, y afirmó que el Proyecto de pacto internacional sobre el derecho al desarrollo se había presentado al Consejo para la adopción de nuevas medidas.
Los derechos humanos pueden salvar los ODS
La Cumbre sobre los ODS, del 18 y 19 de septiembre de 2023 ofrece una oportunidad decisiva para elaborar un plan mundial sobre formas de acelerar la aplicación de los ODS.
La Cumbre, convocada durante la Asamblea General de las Naciones Unidas, marcará el ecuador del plazo para alcanzar la Agenda 2030 y sus ODS.
Marcella Favretto, Jefa de Desarrollo Sostenible de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, declaró que el mundo ya se había alejado de la senda necesaria, pero que la pandemia, la emergencia climática, la crisis energética y las guerras han agravado la situación.
Asimismo, indicó que la Agenda 2030 está firmemente anclada en los derechos humanos y que estos son las palancas fundamentales para acelerar el progreso.
"Los derechos humanos son relevantes en los 17 ODS, son vitales para hacer realidad la promesa principal de la Agenda 2030 de no dejar a nadie atrás y llegar primero a los que están más excluidos. La única manera de cumplir con la Agenda 2030 tal y como fue concebida es a través de un enfoque basado en los derechos humanos y de forma inclusiva y participativa".