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La lucha contra la esclavitud debe continuar a pesar de la pandemia

02 diciembre 2020

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En Mauritania, la pandemia ha empeorado el sufrimiento de antiguas víctimas de esclavitud, afirmó Brahim Ramadhane, un activista contra la esclavitud.

"En todos los ámbitos, antiguos esclavos se han visto sin trabajo, en especial antiguas esclavas quienes en su mayoría se dedican a vender comida por las tardes en las calles," explicó. 

Ramadahane es un activista contra la esclavitud y fundador de la Institución por los Derechos Humanos en el Sahel, un grupo comprometido con la lucha contra la esclavitud a través de la educación.  Su ONG se vio obligada a cerrar las puertas de sus escuelas e interrumpir sus campañas por pueblos de concienciación contra la esclavitud y la discriminación debido a las medidas de confinamiento, indicó.  Pero el confinamiento no detuvo las actividades de la ONG, precisó. 

"Seguimos presionando a las autoridades y hemos llevado a cabo campañas para ayudar a las familias afectadas", declaró.  "Distribuimos alimentos y agua y dimos cursos en línea para los hijos de los más pobres."

La esclavitud sigue siendo un problema en muchas partes del mundo, a pesar de la abolición previa de estas prácticas en todo el planeta.  "Formas modernas de esclavitud" se manifiestan de diferentes formas incluyendo el trabajo forzoso, el matrimonio forzoso, otras prácticas de esclavitud y parecidas a la esclavitud, además de la trata de personas. También incluye la servidumbre por deuda, por la cual una persona es engañada para que trabaje por poco o ningún salario y sin control alguno sobre su deuda. 

En un discurso conmemorando el Día Internacional de la Abolición de la Esclavitud, la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos Michelle Bachelet afirmó que la pandemia ha hecho aun más vital el compromiso de liberar a las más de 40 millones de personas que se calcula que viven en esclavitud. 

"Hay personas que siguen naciendo en la esclavitud porque sus padres y antepasados fueron esclavizados," señaló Bachelet. "Las personas siguen siendo tratadas como propiedad. Muchas víctimas sufren múltiples formas de esclavitud, además de otras violaciones de derechos humanos.  La crisis global social, económica y sanitaria que ha provocado la COVID-19 incrementa estos riesgos."

Ramadhane pertenece a la minoría étnica Haratin en Mauritania, y fue esclavo durante los 20 primeros años de su vida.  La educación fue el factor que le ayudó a situarle en el camino hacia la libertad. 

"Cuando fuí a la escuela, empecé a entender que la esclavitud es algo injusto, que es el resultado de una interpretación errónea de la religión," declaró.  "La escuela me liberó."

Mauritania fue el último país del mundo en abolir la esclavitud, la cual fue prohibida por ley en 1981.  Esta práctica está arraigada en la división por castas de la sociedad de ese país.  El puebo Haratin, uno de los grupos étnicos más numerosos del país, sigue siendo considerado una casta de esclavos en numerosas partes del país.  De acuerdo con el Índice Global de Esclavitud 2018, se calcula que 90.000 personas siguen viviendo en formas modernas de esclavitud de una población total de 4,1 millones.

Ramadhane afirmó que luchar contra un sistema tan arraigado ha supuesto todo un desafío. Hace pocos años, Ramadhane fue encarcelado durante 18 meses despúes de que él y otros activistas viajaran a distintos pueblos en la parte meridional del país educando a sus poblaciones sobre la condición ilegal de la esclavitud.  El miedo y la ignorancia alimentan esta persecución, explicó. 

"Cuando hablamos sobre casos de esclavitud, es como si estuviéramos haciendo algo en contra del país", Ramadhane señaló. "Eso es por lo que fui a prisión."

La educación es un elemento clave en la lucha contra la esclavitud, aseguró Ramadhane.  Su fundación ha conseguido escolarizar hasta la fecha a más de 1.500 hijos de descendientes de esclavos de su comunidad así como otros niños procedentes de familias que han sido discriminadas por el Gobierno. 

Ramadhane declaró que la pandemia le ha obligado a redoblar sus esfuerzos en la lucha contra la esclavitud y la discriminación.   

"Sigue siendo importante combatir los vestigios de la esclavitud y en especial sus consecuencias a largo plazo a través de acciones en lugar de palabras y denuncias, de lo contrario, acabaremos siendo como los partidos políticos que usan a las víctimas en lugar de ayudarlas," afirmó. 

2 de diciembre de 2020

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