Fondo de Contribuciones Voluntarias para las Víctimas de la Tortura presenta perfiles de reparación y valentía

Durante décadas, los supervivientes de tortura han encontrado espacios seguros, personas que les han ayudado a curarse e incluso asesoramiento para encontrar sentido a la vida, mediante programas financiados por el Fondo de Contribuciones Voluntarias de las Naciones Unidas para las Víctimas de la Tortura.

"La tortura no es una cosa del pasado," afirma Lawrence Mutte, Presidente del Consejo de Administración del Fondo, "la necesidad de ayudar a las víctimas es cada vez más acuciante.  Cada año, el Fondo se ve obligado a rechazar docenas de solicitudes debido a la falta de recursos económicos disponibles."

Ahora, para conmemorar su 40º aniversario, el Fondo publicará una serie de 40 perfiles durante los próximos 40 días, comenzando el 26 de junio, el Día Internacional en Apoyo de las Víctimas de la Tortura.

Las historias presentan a personas de todos los rincones del planeta quienes han sobrevivido a lo inimaginable y han logrado reconstruir y devolver.  Todos ellos continúan luchando por el derecho a reparación, sanación, y humanidad para los supervivientes de tortura. 

"Estoy totalmente convencido de que aun podemos hacer más para llegar, conectar y dar capacidad a los supervivientes para que formen parte de la solución," declaró Kolbassia Haoussou, el co-fundador de la organización británica Freedom from Torture, una de las beneficiarias del Fondo. 

"No obstante, nuestras comunidades, nuestras sociedades, nuestros líderes deben ayudarnos desplazando la culpa del superviviente al autor, es el autor quien debe llevar el peso de la culpa, no nosotros," aseguró. 

El apoyo económico procedente del Fondo durante las cuatro últimas décadas ha permitido a organizaciones de la sociedad civil transformar las vidas de más de 1,2 millones de supervivientes de tortura y de sus familias, así como contribuir a la sanación de comunidades y a construir un marco global contra la tortura. 

"El tratamiento por sí solo no logrará nunca la rehabilitación completa de los supervivientes de tortura," afirmó Şebnem Korur Fincancı, quién fundó la organización sin ánimo de lucro Fundación de Derechos Humanos de Turquía.  Con apoyo financiero procedente del Fondo, la Fundación ayudó a más de 18.000 supervivientes turcos de tortura y a sus familiares. 

"El tratamiento ha de ser acompañado de otros mecanismos de reparación: el acceso a la justicia, el enjuiciamiento de los autores, compensaciones, y disculpas," añadió ella. 

Lea los Perfiles por el 40º Aniversario aquí.