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Los jóvenes están en la vanguardia de la lucha contra la discriminación racial

06 agosto 2021

Desde la insurrección de Soweto (Sudáfrica) que tuvo lugar hace 45 años, hasta las protestas mundiales del movimiento Black Lives Matter [Las vidas de los negros importan] que se desarrollan hoy, los jóvenes han estado en la vanguardia de la lucha contra la discriminación racial, la xenofobia y la intolerancia, afirmó la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet.

La Declaración y Programa de Acción de Durban (DDPA) subraya justamente la importante función que desempeñan los jóvenes en la lucha contra la discriminación racial”, dijo Bachelet. “La DDPA pide la participación activa de los jóvenes en la elaboración de estrategias para combatir la discriminación racial y exhorta a los Estados a que amplíen la educación relativa a los derechos humanos, comprendida la información sobre la lucha contra la discriminación y el antirracismo, a fin de educar a niños y jóvenes sobre su derecho a vivir en dignidad, igualdad y respeto mutuo”.

El comentario de Bachelet formó parte de una mesa redonda de debates sobre los retos contemporáneos que afrontan los jóvenes en Sudáfrica y en el resto del mundo, y sobre cómo la juventud puede ser agente de cambio. La discusión se enmarcó en el contexto de la conmemoración del 20º aniversario de la Tercera Conferencia Mundial contra el Racismo (WCAR) que concluyó con la DDPA, así como en el 45º aniversario del levantamiento de los jóvenes de Soweto contra el apartheid y el 25º aniversario de la Constitución de Sudáfrica.

La DDPA situó a la discriminación racial contemporánea en su contexto histórico y puso de relieve el legado de discriminación aún vigente que dejaron la trata trasatlántica y el colonialismo europeo, declaró E. Tendayi Achiume, Relatora Especial de las Naciones Unidas sobre las formas contemporáneas de racismo, discriminación racial, xenofobia y formas conexas de intolerancia. La Declaración también denunció el vínculo general entre la desigualdad y la discriminación y condenó la discriminación basada en la raza, la condición étnica o indígena, o la situación migratoria. Además, la DDPA dejó muy claro que los jóvenes eran decisivos para erradicar la discriminación racial, la xenofobia y las formas conexas de intolerancia, una convicción que sigue vigente en la actualidad, añadió Achiume.

“No puede haber cambios sociales significativos sin la participación y el impulso de la juventud”, afirmó la Relatora Especial. “Los cambios profundos exigen audacia y energía, voluntad de desafiar el status quo y, lo que quizá sea más importante, creatividad para concebir de nuevo nuestras sociedades, lo que somos y cómo nos relacionamos con los demás. Esa creatividad, esa energía y ese coraje son particularmente abundantes entre los jóvenes y creo sinceramente que esos rasgos amedrentan a las generaciones de más edad, que son las que usualmente ejercen el poder”. 

El debate, coordinado desde Sudáfrica por conducto de Internet, ofreció además la oportunidad de analizar el tipo de progreso -o la carencia del mismo- en lo tocante a la creación de las condiciones que permitan el desarrollo de los jóvenes, señaló Naledi Pandor, Ministra de Relaciones Internacionales y Cooperación de Sudáfrica. Los jóvenes figuran entre los grupos más afectados por la pandemia, que a muchos de ellos les ha arrebatado el empleo, los padres, los tutores y otros parientes.  

“No debemos desalentarnos”, declaró Pandor. “Los jóvenes pueden y deben estar a la vanguardia en la lucha contra el racismo, la pobreza, la ignorancia, la marginación, la exclusión y la enfermedad”. 

Por su parte, la escritora, ensayista y comentarista política Malaika Mahlatsi advirtió que no es justo pedir a los jóvenes que participen en esos combates, cuando están luchando cada día por sobrevivir. Mahlatsi es miembro de la generación de los “nacidos libres”, los jóvenes sudafricanos que han crecido tras la erradicación del apartheid. La escritora observó que la tasa de desempleo entre los jóvenes del país alcanza el 20 por ciento. 

“¿Cómo podemos pedirles a los jóvenes que contribuyan a desmontar las estructuras de poder, cuando ellos están en sus casas porque no encuentran empleos?”, agregó la escritora. “Eso es exigirles demasiado”. 

“El meollo de la cuestión…. es por qué mantenemos la misma conversación (sobre racismo y discriminación) 20 años después”, añadió Mahlatsi. “Porque no hemos mantenido conversaciones sinceras acerca del racismo. Para mí, que soy joven, la manera significativa de combatir el racismo sería crear una economía igualitaria, que sea inclusiva y esté basada en los derechos humanos…. Esta situación cambiará muy poco si no existe la voluntad política de cambiar las estructuras de gobierno que propician el racismo y la discriminación”. 

En la última década ha habido un gran caudal de movilización en pro de la igualdad y la justicia. Los jóvenes han encabezado muchos de esos movimientos. Entre otros, figuran las iniciativas para descolonizar las universidades y suprimir los obstáculos económicos que impiden el acceso a la enseñanza superior en Sudáfrica y el movimiento transnacional Black Lives Matter [Las vidas de los negros importan], impulsado por el asesinato de George Floyd.

El año 2021 marca una divisoria de aguas en la lucha contra el racismo en el mundo, dijo Abigail Noko, Directora de la Oficina Regional del ACNUDH para África Meridional. Aunque todavía quedan asuntos pendientes en la tarea de desmantelar el racismo, en los dos decenios transcurridos desde la primera Conferencia Mundial contra el Racismo:

  • 42 Estados Miembros han adoptado o enmendado legislaciones que prohíben la discriminación racial;
  • 33 Estados Miembros han creado órganos para combatir la discriminación racial y promover la igualdad;
  • 23 Estados Miembros e instituciones regionales han adoptado medidas políticas nacionales y regionales contra el racismo;
  • Otros 26 países han ratificado la Convención Internacional sobre la eliminación de todas las formas de discriminación racial, con lo que asciende a 182 el total de Estados Partes en la Convención.

“La DDPA ha alcanzado reconocimiento y aceptación universales como instrumento catalizador de transformaciones”, declaró Noko. “De igual modo que el racismo, la discriminación racial, la xenofobia y las formas conexas de intolerancia fueron un asunto de importancia mundial en 2001, todavía lo son hoy en día y los jóvenes pueden usar la DDPA para consolidar la tolerancia, orientar los cambios y luchar contra el racismo. Necesitamos las voces y las acciones de los jóvenes para romper el silencio que persiste en torno a la discriminación y la opresión”.  

Además, agregó la Ministra Pandor, es preciso que los gobiernos acompañen a los jóvenes en esta tarea y les proporcionen la infraestructura necesaria para que puedan hacer realidad sus sueños. 

“En nuestra calidad de representantes gubernamentales, debemos crear las condiciones que permitan a los jóvenes aplicar su talento y realizar su potencial; que les permita aprovechar su energía y liberar su creatividad; que les haga soñar lo que pueda parecer imposible y alcanzar grandes logros”, terminó diciendo.

 6 de agosto de 2021