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El uso de la tortura en los interrogatorios: Ilícito, inmoral e ineficaz

11 octubre 2017

“La tortura produce información deformada. Es un método más que ineficaz, es contraproducente. Esa información deformada genera decisiones y políticas erróneas en los máximos niveles y las decisiones equivocadas han causado ya la pérdida de muchas vidas”, afirmó Mark Fallon.

El Sr. Fallon sabe de qué habla. En sus años de servicio como oficial de los cuerpos antiterroristas del gobierno de Estados Unidos, comprobó de primera mano las repercusiones de la información tergiversada que se obtenía mediante la tortura. El Sr. Fallon formuló sus declaraciones en el marco de un evento de alto nivel sobre la tortura que tuvo lugar en la Asamblea General de las Naciones Unidas en Nueva York. En la reunión se prestó especial atención al uso ilícito, inmoral e ineficaz de la tortura en los interrogatorios.

“Si usted emplea la coerción o procede abusivamente, puede obtener información. Quizá obtenga la información que desea, pero eso no significa que sea necesariamente la verdad”, dijo el Sr. Fallon.

En el evento también hizo uso de la palabra la Sra. Nina Holm Andersen, jefa de los investigadores que interrogaron a Anders Breivik, autor del ataque terrorista que en 2011 causó 77 muertes en Noruega. La Sra. Andersen hizo hincapié en que la clave en el interrogatorio de un sospechoso es la empatía –que no debe confundirse con la simpatía-, especialmente cuando las declaraciones del reo apuntan a que otro ataque es inminente.  

“En el caso de Breivik, era importante para mí establecer la conexión y asegurarme de que él sentía que lo tomábamos en serio”, señaló. Cuando se genera un contexto seguro y cómodo los sospechosos hablan con más facilidad, lo que aumenta la probabilidad de que revelen información en su contra y que proporcionen un relato más completo de lo que han hecho y de cómo lo hicieron. De ese modo los investigadores pueden obtener información más fiable sobre la cual fundamentar sus decisiones.

La Sra. Andersen emplea el Modelo de Interrogatorios de Investigación, que ofrece consejos prácticos sobre cómo interrogar a un sospechoso sin recurrir a la tortura ni los malos tratos.

Este modelo se basa en el uso de cuestionarios generales para mejorar el intercambio de comunicación y de información, y el empleo de preguntas bien preparadas a fin de evitar malos entendidos y ambigüedades. La técnica de interrogatorio tiene varias etapas, que abarcan la planificación y preparación, la presentación y el establecimiento de la relación, el primer relato voluntario, el cierre del interrogatorio y la evaluación. Estas etapas no sólo evitan las prácticas abusivas sino también mejoran el acopio y la fiabilidad de la información. 

Shane O’Mara, profesor de investigación neurológica experimental en el Trinity College de Dublín, ha practicado amplias investigaciones que demuestran que el uso de la tortura aumenta la probabilidad de que los reos confiesen información falsa e inexacta. Las “tensiones” que experimentan en esos interrogatorios les producen tanta confusión que no son capaces de distinguir lo real de lo imaginario. En esa situación, los sospechosos les cuentan a los interrogadores lo que éstos quieren oír, para poner fin a la tortura.   

El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Zeid Ra'ad Al Hussein, afirmó que ya en 1798 Napoléon Bonaparte les prohibió a sus generales que usaran la tortura, porque sabía que no funcionaba. Pero su uso se mantuvo en muchos países del mundo. Zeid advirtió también que la tortura “genera un enorme resentimiento en la comunidad en general” a la que pertenecen los detenidos que se ven sujetos a esa práctica inhumana e ilícita.

“Al espolear el deseo de venganza, la tortura genera más odio y más violencia”, señaló.

El Secretario General Adjunto de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, el Sr. Andrew Gilmour, dijo que la Oficina del ACNUDH planifica actualmente la elaboración de un manual sobre los interrogatorios en el marco de las investigaciones, en colaboración con la División de Políticas del Departamento de Operaciones de Mantenimiento de la Paz de las Naciones Unidas. La Iniciativa sobre la Convención contra la Tortura y el Centro Noruego de Derechos Humanos también están preparando una guía sobre el interrogatorio policial que excluye las amenazas y la brutalidad.

El uso de la tortura y los malos tratos contra los detenidos está estrictamente prohibido en virtud de la Convención de las Naciones Unidas contra la tortura y otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes.

FIN

11 de octubre de 2017