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Declaraciones Múltiples mecanismos

INTERVENCIÓN ORAL DE LA RELATORA ESPECIAL PARA LOS DERECHOS HUMANOS DE LOS MIGRANTES, SRA. GABRIELA RODRÍGUEZ, ANTES LA COMISIÓN DE DERECHOS HUMANOS EN SU 57 PERÍODO DE SESIONES

11 abril 2001



11 de abril de 2001


Señor Presidente, Distinguidos Delegados y Delegadas, Señoras y Señores,

Es para mi un honor dirigirme ante ustedes después de un año de intenso trabajo y desarrollo del mandato que me encargaron en 1999 y que confirmaron el año pasado. Durante esta 57 Sesión de la Comisión de Derechos Humanos presento ante ustedes dos informes: el informe general sobre las actividades y desarrollo de mi mandato (E/CN.4/2001/83) y el informe sobre mi visita a Canadá (E/CN.4/2001/83/Add.1.)

Sr. Presidente, no quisiera comenzar mi intervención sin resaltar el inmensurable papel desarrollado por la Alta Comisionada, Sra. Mary Robinson. Con su esfuerzo y apoyo se ha fortalecido la integración de los derechos humanos de los migrantes, no sólo en la agenda de las Naciones Unidas, sino en todos los foros internacionales.

El informe que presento este año se ha enriquecido con el desarrollo del marco jurídico del mandato, los métodos de trabajo, las visitas a los países y la agenda para las próximas visitas. También incluyo mi participación en los trabajos preparatorios para la Conferencia Mundial contra el Racismo, la Discriminación Racial, la Xenofobia y Todas las Formas Conexas de Intolerancia. En el informe doy cuenta de las estrategias y acciones realizadas para la protección plena y efectiva de los derechos humanos de los migrantes. También encontrarán las denuncias de violaciones de derechos humanos de los migrantes que he recibido.

Los últimos datos referentes a los flujos migratorios en el mundo muestran que la migración se ha incrementado en los últimos decenios, lo que se traduce en una preocupación creciente de los gobiernos, la sociedad civil, los organismos internacionales, gubernamentales y no gubernamentales. En este campo he podido observar una tendencia por parte de algunos Estados a admitir los efectos positivos de la migración, cambiando el discurso negativo que genera discriminación.

Sin embargo, es mi deber, llamar la atención de todos los actores sobre la desprotección de los migrantes ante potenciales o reales violaciones de sus derechos fundamentales. Resulta claro que nos enfrentamos ante violaciones que en muchos casos también son cometidas por actores no estatales, como patrones y empresas privadas tanto nacionales como transnacionales. No podemos olvidar la corresponsabilidad de los Estados de origen, tránsito y destino. Tengo que reconocer que los Estados receptores se enfrentan a desafíos de gran envergadura frente a la migración irregular; uno de los factores que influye, en el tráfico y la trata de migrantes, es la falta de caminos adecuados para la migración regular.

Señor Presidente, la migración, es un fenómeno multicausal. La exclusión social y económica, la atracción que ejercen los países más desarrollados, la necesidad que tienen estos países de contar con la migración, los conflictos armados internos y los desastres naturales, todas ellas son causas que provocan migración. Recordemos que la migración ha sido motor de desarrollo para los países desarrollados, donde el aporte económico y cultural de los migrantes ha sido beneficioso y enriquecedor.




Al analizar la migración vemos que se conjugan aspectos sensibles que ponen en riesgo la integridad de la persona y sus derechos fundamentales. Por este motivo, Señor Presidente, hago un llamamiento al diálogo con los Estados que están cerrando sus fronteras por temor a una supuesta invasión de migrantes irregulares, para que juntos encontremos alternativas jurídicas y políticas que generen acciones para la migración regular, que pueda ofrecer los beneficios derivados de la misma y garantizar la protección necesaria a los migrantes.

Es urgente pasar a la acción en los siguientes campos:

Respecto a la cuestión de la mujer migrante, me preocupan especialmente los informes recibidos sobre la trata y el tráfico de personas en el mundo y en particular de las mujeres. En este contexto y teniendo en cuenta los informes presentados por los programas de lucha contra la trata y tráfico de personas de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), podemos observar que alrededor del 47.5% de los migrantes son mujeres. Dichas estimaciones nos muestran que unos 4 millones de personas son víctimas de la trata en el mundo y se estima que cientos de miles de mujeres caen en manos de los agentes del tráfico de personas para ser introducidas en el territorio de otros países. Estas redes se aprovechan de las necesidades de los trabajadores migrantes en los países de destino y de la falta de oportunidades en los países de origen y se dedican a engañar, chantajear y crear dependencia esclavizante ante la situación de vulnerabilidad en que se encuentran los migrantes indocumentados. Así mismo, no podemos pensar que las redes de delincuencia organizada sean ajenas a los países de destino y tránsito. En muchos casos son también nacionales del estado de acogida los responsables de estas mafias. Para poder seguir de cerca esta cuestión he establecido contacto con las redes de ONGs que trabajan en este campo para buscar vías de protección y alerta temprana. La mujer migrante es doblemente discriminada, como mujer y como extranjera. Esto se acrecienta cuando además es criminalizada y tratada como delincuente, siendo en realidad una víctima. Cuando digo víctima, no me estoy refiriendo a vulnerabilizar a la mujer migrante per se. La mujer migrante que tomó la decisión de migrar, lo hizo en un acto de esperanza de ayudar a los suyos, dignificar y dignificarse. La mujer migrante es una mujer de grandes fortalezas y potencialidades y merece desarrollarlas y beneficiarse de ellas.

Es particularmente preocupante el caso de los niños y las niñas migrantes. La clandestinidad o la irregularidad a la que se ven sometidos un gran número de migrantes adultos, unas veces por desinformación y otras por el excesivo retraso de la administración, trasciende de padres a hijos. Nos encontramos con situaciones en las que, por ejemplo, los hijos de personas migrantes encuentran grandes dificultades para acceder a los servicios de salud y la educación, otras veces este acceso se les niega en contravención con la Convención sobre los Derechos del Niño.

Continúan siendo alarmantes los brotes de xenofobia, racismo, discriminación racial e intolerancia contra migrantes en los países de destino y tránsito. Las poblaciones migrantes sufren una discriminación estructural que se expresa en diversas formas de exclusión y de reducción de posibilidades en su inserción laboral. Señor Presidente quisiera llamar la atención, además de las cuestiones que he resaltado durante mis intervenciones en las reuniones preparatorias para la Conferencia Mundial, sobre la cuestión de la intolerancia religiosa. Dicha intolerancia vinculada a la xenofobia, nos debe llamar a eliminar radicalmente actos que se alejen de un macroecumenismo, en donde todas las culturas religiosas del mundo tengan cabida y se cese de discriminar y atacar con actos xenófobos de intolerancia religiosa a personas y comunidades migrantes alrededor del mundo. De mi participación en los trabajos preparatorios de la Conferencia Mundial doy cuenta en el informe que presentare a la Segunda Reunión Preparatoria ( A/CONF.189/PC.2/2001)


Las visitas a los países constituyen un medio excelente para establecer un diagnóstico del fenómeno, observar « buenas prácticas » y en caso necesario, poner en conocimiento del Estado las faltas o vacíos que pueden originar o causar violaciones de los derechos humanos de los migrantes. Deseo informarles, que he sido invitada por México y por los Estados Unidos para realizar una visita oficial a ambos países. También he expresado al Gobierno de Filipinas mi interés en visitar el país. Quiero agradecer al Gobierno de Ecuador la amable invitación que me extendió para que lleve a cabo una visita, la cual espero realizar durante el último trimestre del presente año.

El primer Gobierno que me invitó fue Canadá, país que visité del 17 al 30 de septiembre de 2000. El addendum a mi informe (E/CN.4/2001/83/Add.1) contiene las observaciones, conclusiones y recomendaciones de esa misión. Quiero agradecer al Gobierno de Canadá su decisión de tomar nota de mis recomendaciones y su empeño para seguir trabajando con la sociedad civil en el desarrollo de las políticas de inmigración.

Quiero agradecer a los Gobiernos de Argentina, Canadá, Emiratos Árabes Unidos, los Estados Unidos de América, España y la República Dominicana por sus respuestas a las acciones urgentes y a las comunicaciones regulares transmitidas. Información al respecto la encontrarán en el informe que presento a esta Comisión.

Por otro lado, no puedo pasar por alto la proclamación del día 18 de diciembre como Día Internacional del Migrante, por parte de la Asamblea General, mediante la resolución 55/93 del 4 de diciembre de 2000. Por este motivo quiero felicitar públicamente al Gobierno de México por haber hecho de esta iniciativa una realidad.

Hago un llamamiento a los países para que ratifiquen la Convención Internacional sobre la protección de los derechos de todos los trabajadores migratorios y de sus familiares. También doy la bienvenida a los países que han ratificado la Convención de las Naciones Unidas contra la Delincuencia Organizada Transnacional y los dos protocolos contra la trata de personas, especialmente mujeres y niños y el tráfico ilícito de migrantes por tierra mar y aire.

Señor Presidente, distinguidos delegados y delegadas, colegas, estoy decidida a conseguir que este mandato, que ha devuelto esperanza a millones de personas sobre la posibilidad de ver sus derechos protegidos y reconocidos, sea un mecanismo efectivo. No podemos olvidar, Señor Presidente, que la migración es necesaria y productiva. Considerando la situación actual en que ésta se realiza, se debe trabajar en la formulación de políticas y acciones concretas que involucren a los países de origen y destino. Necesitamos el apoyo y compromiso de los Estados en esta gran tarea que nos hemos propuesto.

Muchas gracias.

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