Los Principios Rectores fueron elaborados por el antiguo Representante Especial del SG para la cuestión de los derechos humanos, las empresas transnacionales y otras empresas comerciales. Han sido ampliamente respaldados por organizaciones internacionales y regionales, Estados, empresas comerciales, redes industriales y sindicales y organizaciones de la sociedad civil. Reflejan y se basan en la estructura de tres pilares del marco "Proteger, Respetar y Remediar", que consta de 31 principios, cada uno de ellos seguido de un breve comentario. En conjunto, los Principios Rectores esbozan medidas para que los Estados garanticen y fomenten el respeto de los derechos humanos por parte de las empresas; proporcionan un plan para que las empresas respeten los derechos humanos; y ofrecen un conjunto de puntos de referencia para que las partes interesadas evalúen el respeto de los derechos humanos por parte de las empresas.