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Notas de prensa Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos

Actualización sobre Israel/Territorio Palestino Ocupado

03 noviembre 2023

Fuerzas israelíes hacen una redada en las calles y detienen a un palestino en Al-Bireh, Cisjordania, 2 de noviembre de 2023. © Issam Rimawi / Anadolu

Desde

Portavoz del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos: Liz Throssell

Lugar

Ginebra

Aunque se ha dedicado gran atención a los ataques en Israel y a la escalada de las hostilidades en Gaza desde el 7 de octubre, la situación en Cisjordania ocupada, incluido Jerusalén Oriental, es alarmante y urgente ante las crecientes y múltiples violaciones de derechos humanos contra la población palestina que se producen en la zona.

Desde el 7 de octubre hasta el 2 de noviembre, 132 palestinos y palestinas, entre ellos 41 niños, han muerto en Cisjordania: 124 a manos de fuerzas israelíes y ocho a manos de colonos. También han muerto dos soldados israelíes.

Las fuerzas israelíes han recurrido cada vez más a tácticas y armas militares en operaciones de mantenimiento del orden, incluyendo una operación nocturna con ataques aéreos al campamento de refugiados de Yenín. El mantenimiento del orden se rige por el derecho internacional de los derechos humanos, que prohíbe el uso intencionado de la fuerza letal salvo cuando sea estrictamente necesario para proteger la vida.

La violencia de los colonos, que ya había alcanzado niveles sin precedentes, también ha aumentado notablemente con una media de siete ataques diarios. En más de un tercio de estos ataques se utilizaron armas de fuego.

Según lo que hemos documentado, en muchos de estos incidentes los colonos iban acompañados por miembros de las fuerzas israelíes o llevaban uniformes y rifles del ejército. Además de la impunidad casi total de la violencia de los colonos, nos preocupa que los colonos armados hayan actuado con el consentimiento y colaboración de las fuerzas y autoridades israelíes.

Esta violencia está obligando a comunidades enteras a abandonar sus tierras. Desde el 7 de octubre, casi 1.000 palestinos y palestinas de al menos 15 comunidades de pastores se han visto obligados a abandonar sus hogares. En estas circunstancias, la violencia de los colonos puede equivaler a traslado forzoso de una población, una grave violación del Cuarto Convenio de Ginebra. Israel, como potencia ocupante, tiene la obligación de garantizar la seguridad y la protección de la población ocupada en virtud del derecho internacional humanitario y de derechos humanos.

En incidentes reiterados, colonos armados han dado ultimátums a comunidades palestinas para que abandonen sus hogares amenazándoles con asesinarles si no obedecen. Un ejemplo escalofriante de la intimidación que sufren las comunidades es el hecho de que colonos dejaran panfletos en vehículos palestinos con mensajes amenazadores diciendo que se marcharan o que se enfrentarían a la "eliminación".

A pesar de que cientos de colonos participan en esta violencia diaria, desde el 7 de octubre las fuerzas israelíes solo han detenido a dos colonos por agredir a palestinos y matar a un agricultor palestino.

Desde el 7 de octubre, las fuerzas israelíes han detenido a casi 2.000 palestinos y palestinas. Hemos recibido informes fidedignos y constantes que indican un nuevo aumento de los malos tratos a detenidos, lo que en muchos casos podría equivaler a tortura. Dos palestinos detenidos desde el 7 de octubre han muerto mientras estaban detenidos. Según se informa, a los detenidos no se les conceden las debidas garantías procesales y judiciales, tal y como exige el derecho internacional.

Muchas comunidades se encuentran fundamentalmente confinadas, al estar las carreteras y puestos de control cerrados y su libertad de circulación restringida. Algunas de las comunidades palestinas más vulnerables han quedado completamente aisladas sin acceso a bienes y servicios esenciales.

El recrudecimiento de los combates al norte de Gaza ha seguido aumentando la cifra alarmante de víctimas que, según el Ministerio de Sanidad de Gaza, asciende a más de 9.000 muertos, entre ellos 3.700 niños, y 23.000 heridos en menos de cuatro semanas. En los últimos días, las fuerzas israelíes han intensificado los ataques al campamento de refugiados de Yabalia, al norte de Gaza, y han destruido decenas de edificios residenciales. También se ha informado de ataques similares en otras zonas de Gaza, como por ejemplo el campamento de refugiados de Al Bureij, en el centro de Gaza, donde se habrían destruido decenas de edificios.

Al parecer, ha aumentado el número de víctimas, así como el uso de armas explosivas de amplio alcance en algunas de las zonas más densamente pobladas de Gaza.

Nos preocupa seriamente que ambas partes no respeten los principios de distinción y proporcionalidad.

Instamos firmemente a los grupos armados palestinos a que pongan fin inmediato al lanzamiento indiscriminado de cohetes contra Israel. También deben liberar de inmediato y sin condiciones a todos los rehenes en su poder, lo que contraviene el derecho internacional humanitario. La ubicación conjunta intencionada de objetivos militares y civiles o personas fuera de combate con la intención concreta de de impedir el ataque a objetivos militares constituye una grave violación del derecho internacional humanitario.

Para más información y solicitudes de medios de comunicación, póngase en contacto con:

En Ginebra

Ravina Shamdasani - + 41 22 917 9169 / ravina.shamdasani@un.org o
Liz Throssell + 41 22 917 9296 / elizabeth.throssell@un.org o
Jeremy Laurence +41 22 917 9383 / jeremy.laurence@un.org o
Marta Hurtado + 41 22 917 9466 / marta.hurtadogomez@un.org

En Nairobi

Seif Magango +254 788 343 897 / seif.magango@un.org
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