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Declaraciones Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos

Situación en Ucrania

25 marzo 2022

Situación en Ucrania

Pronunciado por

Sra. Matilda Bogner, Jefa de la Misión de las Naciones Unidas para la Vigilancia de los Derechos Humanos en Ucrania, sobre la situación en Ucrania

Día tras día, el número de víctimas y el sufrimiento humano en ciudades, ciudades pequeñas y pueblos de toda Ucrania sigue en aumento.  Los hechos que hemos venido informando hablan por sí solos: desde que las fuerzas armadas rusas lanzaran su ataque el 24 de febrero, al menos 1.035 civiles han sido asesinados y al menos 1.650 han resultado heridos.

Y digo «al menos» porque aun no contamos con el panorama completo en localidades donde se han producido combates intensos, en especial en Mariupol y Volnovaja. 

Fuerzas militares han usado armamento explosivo con efectos en zonas amplias en o cerca de zonas pobladas, que incluyen misiles, proyectiles y cohetes de artillería pesada así como ataques aéreos.  Se han destruido a gran escala domicilios privados, edificios residenciales de varios pisos, edificios administrativos, instalaciones médicas y educativas, estaciones de agua y sistemas eléctricos,  con  efectos desastrosos para los civiles y sus derechos humanos, incluyendo sus derechos a la salud, alimentos, agua, educación y vivienda. 

El alcance de víctimas civiles y la destrucción de propiedades civiles indican inequívocamente que se han violado los principios de distinción, de proporcionalidad, la norma de las precauciones factibles y la prohibición de ataques indiscriminados.  Por poner dos ejemplos: el 3 de marzo, 47 civiles fueron asesinados cuando dos escuelas y varios bloques de apartamentos fueron destruidos en Chernigov, y todo parece indicar que esto fue resultado de ataques aéreos rusos.

El 9 de marzo, el Hospital Nro. 3 de Mariupol fue destruido y es muy probable que se debiera también a un ataque aéreo ruso.  Diecisiete civiles, entre los que se encuentran niños y mujeres embarazadas, resultaron heridos.  Una mujer herida necesitó de ayuda para dar a luz por cesárea poco después del ataque, pero ni ella ni su bebé consiguieron sobrevivir.  Los médicos tuvieron que operar a ambos a la luz de las velas.

Estamos también investigando acusaciones de bombardeos indiscriminados por parte de las fuerzas armadas ucranianas en Donetsk y en otros territorios controlados por las auto-denominadas “repúblicas”. 

Estos ataques causan un enorme sufrimiento humano y podrían constituir crímenes de guerra, y deben parar de inmediato.

Desde el 24 de febrero, hemos recibido acusaciones contra fuerzas rusas por disparar y matar a civiles que iban en coche durante las evacuaciones, sin tomar todas las precauciones factibles o dar aviso con la debida antelación y por medios eficaces. Estamos también investigando otras acusaciones contra fuerzas rusas por asesinato de civiles, incluso  durante reuniones pacíficas. Hemos recibido también dos acusaciones de asesinato de civiles en territorio controlado por el gobierno debido a su presunta afiliación a las fuerzas rusas o por su apoyo a los puntos de vista pro-rusos.

Hemos documentado 22 casos de detención arbitraria y de desaparación forzada de funcionarios locales en regiones bajo el control de fuerzas rusas, 13 de los cuales fueron posteriormente puestos en libertad.  Hemos documentado asimismo la detención arbitraria y desaparición forzada de 15 periodistas y activistas de la sociedad civil quienes se opusieron abiertamente a la invasión en las regiones de Kiev, Kherson, Lugansk y Zaporiyia.   Actualmente estamos intentando verificar informes que acreditan que cinco de los periodistas y tres de los activistas fueron posteriormente puestos en libertad.   El paradero de las demás personas sigue siendo desconocido.

Nos siguen preocupando los vídeos que muestran a prisioneros de guerra siendo interrogados tras ser capturados tanto por fuerzas ucranianas como rusas.    Los prisioneros de guerra deben recibir un trato humano, y no ser sometidos a actos violentos y ser protegidos de insultos y de la curiosidad pública.

Desde la invasión por parte de la Federación Rusa, personas sospechosas de ser ladrones, contrabandistas, simpatizantes de Rusia o personas que se saltaron el toque de queda han sido sometidos a palizas en el territorio controlado por el Gobierno de Ucrania.  Hemos recibido acusaciones creíbles de más de 40 casos de maltrato por parte de agentes de policía, miembros voluntarios de las fuerzas de defensa y otros.

Este mes pasado se ha puesto de relieve el papel absolutamente fundamental que juegan los periodistas para poder sacar a la luz la información en circunstancias tan difíciles y peligrosas.  Pero tal como hemos podido ver, según se han ido intensificando las hostilidades, los periodistas y los trabajadores de medios de comunicación se enfrentan a riesgos cada vez mayores para desarrollar su labor.   Hasta la fecha, 7 periodistas y trabajadores de medios de información han sido asesinados en Ucrania desde el 24 de febrero, y 12 han sido víctimas de ataques armados, en los cuales seis han resultado heridos.   Hay al menos un periodista desaparecido, siendo su última ubicación conocida en una zona de hostilidades permanentes.

Estamos sumamente preocupados por el drama que están viviendo las personas que ya se encontraban en una situación vulnerable antes del ataque militar.   Las personas con discapacidades han tenido dificultades para acceder a refugios anti-aéreos o a otras zonas seguras. También se han quedado sin acceso a medicamentos esenciales debido al elevado nivel de inseguridad en la zona.

Los centros de atención sanitaria de largo plazo para personas con discapacidades, y para las personas mayores en las regiones de Kiev, Jarkov y Lugansk se encuentran en una situación humanitaria dramática.  Entre los combates y la falta de alimentos, agua, calefacción, electricidad y medicamentos, los residentes de estos centros son más vulnerables que nunca ya que dependen de terceras personas para su cuidado y apoyo.

Ustedes ya han recibido información de colegas sobre la labor humanitaria en curso que Naciones Unidas lleva a cabo en Ucrania.   Apelamos a todas las partes a que aseguren corredores seguros para la evacuación de civiles de zonas peligrosas y a que permitan la entrega puntual de ayuda humanitaria a la población civil en todo el país.

Y ya para acabar, tal como el Secretario General declaró el 22 de marzo, la guerra se encamina a un punto muerto, y a gran velocidad, mientras el pueblo ucraniano tiene que soportar un infierno.  Es hora de que detengamos los combates ya.

Gracias

FIN