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Declaraciones Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos

Declaración en video de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet

Minorías y apatridia

29 noviembre 2018

Foro de las Naciones Unidas sobre cuestiones de las Minorías

29 de noviembre de 2018

Hola a todos:

El Foro sobre Cuestiones de las Minorías es una plataforma excepcional para que los Estados Miembros interactúen con las minorías, las organizaciones de la sociedad civil y los órganos de las Naciones Unidas, a fin de compartir políticas y prácticas, y elaborar recomendaciones para defender los derechos de las personas que pertenecen a esas minorías.

He recibido con beneplácito la atención que el Foro prestará este año a la apatridia. 

Ser apátrida a menudo significa estar privado del acceso a muchos derechos humanos esenciales y libertades fundamentales. Son numerosos los casos en los que los apátridas se enfrentan a una vida sin oportunidades de educación o empleo, y sin acceso adecuado a la atención médica y otros servicios públicos básicos, incluido el acceso a la justicia. La apatridia también puede hacerles especialmente vulnerables al abuso y la explotación. 

Y no es algo que ocurra simplemente de manera accidental.  A algunas personas se les convierte en apátridas, mediante políticas que no cumplen el cometido de garantizar que todos, sin discriminación, dispongan de una nacionalidad. 

Según los estudios realizados al respecto, tres cuartos de los apátridas del mundo pertenecen a alguna minoría. 

Las minorías pueden ser especialmente susceptibles al desplazamiento forzoso en sus propios países –o verse obligadas a emigrar-, situaciones ambas que las hacen vulnerables a la condición de apatridia.

Asimismo es cierto que los grupos apátridas –muchos de ellos minorías- son más vulnerables al desplazamiento forzado y la migración. 

Esta vulnerabilidad suele ser muy aguda en el caso de las mujeres apátridas, a las que además puede privarse del disfrute de varios derechos humanos, entre otros su derecho a la salud sexual y reproductiva, y de los niños, a los que se les puede denegar la educación y otros derechos fundamentales.

La Declaración Universal de Derechos Humanos proclama el principio esencial de que todos los seres humanos, sin discriminación alguna, deben disfrutar de los derechos y las libertades fundamentales.

El derecho a una nacionalidad, que forma parte de esos derechos, es tan fundamental que está reconocido en la Declaración Universal y en muchos otros instrumentos internacionales de derechos humanos.

Es preciso que los Estados tomen medidas positivas para combatir la apatridia en beneficio de todos, pero especialmente, de las minorías. Hay múltiples maneras de hacerlo, entre otras garantizar el acceso, sin discriminación, a la inscripción de los nacimientos y la documentación necesaria para adquirir la nacionalidad.

Espero que el Foro contribuya a esclarecer este asunto, que es fundamental, aunque a menudo se pasa por alto. 

Lamento mucho que no podré participar en los debates del Foro en los próximos dos días, aunque espero que tendré la oportunidad de examinar las ideas y recomendaciones que formulen todos los interesados –entre otras, las de mi Oficina- en relación con la manera de prevenir y combatir la apatridia que afecta a muchas minorías y de garantizar a todos el derecho a la nacionalidad.

Gracias


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