Resumen

El contrato social fiscal y los cimientos de la legitimidad fiscal se han visto socavados por varios factores y acciones, entre los que figuran la petición y la concesión de préstamos insostenibles e irresponsables, la deuda odiosa e ilegítima, la condicionalidad y las reformas económicas perjudiciales. La fiscalidad injusta y la competencia fiscal, las irregularidades en la gestión, los flujos financieros ilícitos, los límites de la arquitectura financiera internacional imperante y la incapacidad de idear un mecanismo fiscal internacional que permita proteger el potencial de los Estados para hacer realidad los derechos humanos al tiempo que pagan sus deudas han agravado aún más los problemas que plantea la observancia del contrato social, que también se caracteriza por la fragilidad de la cooperación y la solidaridad internacionales. Ante el fracaso del actual sistema económico, se está empezando a hacer hincapié en una economía basada en los derechos humanos. Esta presión o reivindicación en favor de replantearse la economía a nivel mundial, regional y nacional es el resultado de la concienciación sobre los retos a los que se enfrenta la ciudadanía en general para la supervivencia básica diaria. En consecuencia, el presente informe vuelve a examinar el enfoque basado en los derechos humanos sobre la economía y también los vínculos entre la financiación del desarrollo de los países y las expectativas de la sociedad.