Declaraciones Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos
Llamamiento urgente a una cesación del fuego y a la puesta en libertad de los rehenes
12 mayo 2024
Me siento profundamente afligido por el rápido deterioro de las condiciones en Gaza a la vez que las fuerzas israelíes intensifican sus ataques aéreos en Jabaliya y Beit Lahiya, en el norte de Gaza, así como en zonas de Gaza central. Paralelamente, cientos de miles de palestinos y palestinas huyen de Rafah después que las Fuerzas de Defensa de Israel ordenaran nuevas evacuaciones de esta ciudad sureña, conduciendo de nuevo a un desplazamiento masivo de una población que ya está profundamente traumatizada. También me preocupan los informes de lanzamientos indiscriminados de cohetes desde Gaza.
Desde el 6 de mayo, cuando las IDF emitieron una orden de evacuación a la población palestina en el este de Rafah, más de 278.000 personas han sido desplazadas. Entre ellas se incluyen a personas con discapacidades, personas enfermas crónicas, personas mayores, personas heridas, mujeres embarazadas, y muchas otras que son físicamente incapaces de moverse sin ayuda.
Las últimas órdenes de evacuación emitidas afectan a cerca de un millón de personas en Rafah. Y ahora, ¿a dónde tienen que desplazarse?
¡No queda ningún lugar seguro en Gaza!
Estas personas exhaustas, famélicas, muchas de las cuales ya se han visto obligadas a desplazarse en repetidas ocasiones, no cuentan con ninguna opción buena. Otras poblaciones de Gaza, incluyendo Khan Younis, la cual ha de recibir supuestamente a las personas que están siendo desplazadas desde Rafah actualmente, han sido reducidas a escombros, y siguen además siendo sometidas a ataques. No queda ningún lugar seguro.
He expresado en repetidas ocasiones mi alarma por las catastróficas consecuencias que tendría una posible ofensiva a gran escala en Rafah, incluyendo la posibilidad de nuevos crímenes atroces. No veo ninguna forma de que las últimas órdenes de evacuación emitidas, y mucho menos un ataque en toda regla, en una zona con una presencia muy densa de civiles, sea compatible con los requisitos vinculantes del derecho internacional humanitario y con los dos conjuntos de medidas provisionales vinculantes establecidas por la Corte Internacional de Justicia.
En estos momentos de desesperación, que se ven empeorados por las acciones que impiden la entrada de ayuda humanitaria en Gaza a través de los tres puntos de cruce, existe una carencia grave de combustible, la cual está dificultando todo – desde el movimiento a la distribución de alimentos, el funcionamiento de hospitales y de los servicios de urgencia, desde el tratamiento de las aguas residuales hasta las telecomunicaciones. Me preocupa también enormemente la seguridad de los trabajadores humanitarios en las zonas afectadas.
Vuelvo a reiterarlo. ¡Una ofensiva a gran escala en Rafah no debe producirse!
Todos los Estados con influencia en la zona deben hacer todo lo que esté en sus manos para impedirlo - para proteger las vidas de los civiles.
Hago un llamamiento urgente a Israel y a los grupos armados palestinos para que acuerden una cesación del fuego, y además todos los rehenes deben ser puestos en libertad de inmediato.